Con los
ojos abiertos
Hace meses
que paso regularmente frente a esta puerta sin prestarle mayor atención. La enredadera
estaba sin hojas y tenía aspecto de estar seca. La buganvilla sin flores
parecía un matorral sin ningún atractivo. Lo que mis ojos veían era una simple
puerta de madera, así que durante meses pasé por delante suyo indiferente, sin
tan siquiera mirarla.
Hace unos
días volví a pasar frente a la puerta, pero esta vez algo llamo mi atención. La
primavera hizo su trabajo y cubrió la enredadera de hojas y llenó la buganvilla
de esas preciosas brácteas de intenso color fucsia. Todo había cambiado. Saqué
la cámara y encuadré, o mejor dicho, re encuadré, dejando entrever el sombreado
y fresco jardín que se esconde tras la vieja puerta de madera.
La escena
estaba preparada. Yo solo pase por allí con los ojos abiertos
Ahora lamento
todas las fotos que me habré perdido por no haber estado allí en el momento
oportuno.
Saludos,
¡Hasta
pronto!
jmartinezbert
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