jueves, 29 de septiembre de 2016

Los árboles y el bosque


A veces, como dice el refrán, los árboles no dejan ver el bosque. 
A mí me sucede lo contrario, cuando fotografío bosques (o selvas como en este caso) el bosque no me deja ver los árboles. Quiero decir que en la amalgama de hojas, ramas y troncos, los árboles dejan de ser sujetos para convertirse en masa. La falta de luz  y el balance de blancos también contribuyen a acentuar ese efecto. 
Para “rescatar” los árboles del bosque, basta un poco de trabajo con Lightroom y Photoshop. En este caso iluminé los troncos de los árboles principales y trabaje el balance de blancos para darles un color más natural. También les di algo de enfoque y curvas. El objetivo era hacerlos resaltar, sobresalir del bosque. 
A mí el resultado me gusta.
Espero que a vosotros también.
¡Hasta pronto!

jmartinezbert


jueves, 22 de septiembre de 2016

Selva de Irati ISO 3200


Bajo la sombra de las hayas de la Selva de Irati las condiciones de luz son bastante precarias. Aunque sea mediodía, a los rayos de sol les cuesta mucho colarse entre la densa hojarasca de las copas de los árboles, de forma que lo más aconsejable es llevar un trípode para solventar cualquier tipo de problema de falta de luz. 
Pero claro, esto implica tener que caminar unos cuantos kilómetros con el trípode a cuestas y como el equipo, sea el que sea, ya pesa lo suyo, muchas veces termino dejándolo en el maletero del coche. Es algo que siempre acabo lamentando porque tarde o temprano te has de enfrentar a una situación de falta de luz que no se puede resolver de otra forma que subiendo el ISO con la correspondiente pérdida de calidad de imagen.
En fin, la próxima vez cargaré con una mochila más pesada y me llevaré el trípode pero hoy la Selva de Irati os la tengo que mostrar a ISO 3200.  
Aquí os dejo la foto.
Espero que os guste.
¡Hasta pronto!

jmartinezbert

lunes, 12 de septiembre de 2016

Puerto de Tapla


Un lugar que uno no puede dejar de visitar es la Selva de Irati.
El agua fluye por doquier y paseando debajo de las inmensas hayas nos invade una sensación de frescor que, incluso en pleno verano, reconforta y revitaliza nuestro cuerpo y, claro está, nuestro espíritu. 
Cualquiera de los senderos que recorren Irati es un espectáculo de naturaleza en estado puro y en cualquiera de sus rincones uno se pararía para no hacer nada más que impregnarse de naturaleza.
Llevas la cámara, sí, pero llega un momento que se te olvida hasta de que llevas esa cosa colgada del cuello (o del hombro) y solo tienes ojos para mirar alrededor y disfrutar de los muchos rincones excepcionales que nos ofrece este espacio natural.
Cuando te vas, asciendes por una carreterita estrecha que a la sombra de los inmensos árboles te conduce hasta el puerto de Tapla en la sierra de Abodi. Allí tienes que parar para hacer una foto desde la lejanía de la Selva de Irati que queda por debajo del nivel del puerto. 
Yo paré, pero la fortuna quiso que en este momento pasara un pastor conduciendo un rebaño de ovejas así que aproveché la circunstancia para incluir el elemento humano en el paisaje. Creo que la presencia humana en los paisajes en lugar de afearlos los enriquece y nos ayuda a valorar con más precisión las proporciones del espacio natural.  
Aquí os dejo la foto.
Espero que os guste.
¡Hasta pronto!
jmartinezbert